Recetas fáciles con chocolate y avellanas
El chocolate es uno de los ingredientes más versátiles y deliciosos en la cocina. Y cuando se combina con las avellanas, se crea una combinación perfecta que es irresistible. Además, las avellanas aportan una textura crujiente y un sabor único a cualquier plato. Por eso, en este artículo te traemos algunas recetas fáciles con chocolate y avellanas que podrás preparar en casa de manera rápida y sencilla.
Tarta de chocolate y avellanas
La tarta de chocolate y avellanas es un clásico que no puede faltar en ninguna reunión o celebración. Para prepararla, necesitarás los siguientes ingredientes:
- 200 gramos de chocolate negro
- 200 gramos de mantequilla
- 200 gramos de azúcar
- 200 gramos de avellanas picadas
- 4 huevos
- 100 gramos de harina
- Una pizca de sal
Para empezar, derrite el chocolate y la mantequilla al baño maría. Cuando estén bien mezclados, añade el azúcar y las avellanas. En otro bol, bate los huevos con la harina y la sal. Incorpora esta mezcla a la primera y remueve todo bien. Vierte todo en un molde previamente engrasado y hornea a 180 grados durante 30-35 minutos. Una vez lista, puedes decorar la tarta con avellanas enteras y un poco de chocolate fundido.
Helado de chocolate y avellanas
El helado es otro postre perfecto para disfrutar en verano. Y si le añades chocolate y avellanas, ¡mejor que mejor! Para preparar este helado, necesitarás:
- 300 gramos de chocolate negro
- 200 gramos de azúcar
- 400 ml de nata para montar
- 2 yemas de huevo
- 100 gramos de avellanas picadas
Derrite el chocolate al baño maría y bátelo junto con el azúcar y las yemas de huevo hasta conseguir una mezcla uniforme. A continuación, añade la nata y las avellanas picaditas. Mezcla todo bien y vierte la mezcla en un recipiente apto para congelar. Déjalo en el congelador durante 4 horas, removiendo la mezcla cada hora para evitar que cristalice. Pasado ese tiempo, ya tendrás un cremoso helado de chocolate y avellanas listo para degustar.
Magdalenas de chocolate y avellanas
Las magdalenas son un dulce fácil y rápido de preparar que puedes disfrutar en cualquier momento del día. Y si añades chocolate y avellanas, se convierten en una auténtica delicia. Para hacer estas magdalenas, necesitarás:
- 200 gramos de chocolate negro
- 200 gramos de harina
- 150 gramos de azúcar
- 3 huevos
- 100 ml de aceite de girasol
- 100 gramos de avellanas picadas
Derrite el chocolate al baño maría y déjalo enfriar. Mientras, bate los huevos junto con el azúcar hasta conseguir una mezcla espumosa. Añade el aceite y sigue batiendo. Incorpora la harina tamizada y las avellanas picadas. Por último, añade el chocolate fundido y remueve todo bien. Vierte la masa en moldes para magdalenas previamente engrasados y hornea a 180 grados durante 20-25 minutos. Ya tendrás unas deliciosas magdalenas de chocolate y avellanas para desayunar o merendar.
Galletas de chocolate y avellanas
Las galletas son otro dulce que no puede faltar en ninguna casa. Y si le añades chocolate y avellanas, se convierten en un auténtico pecado. Para hacer estas galletas, necesitarás:
- 200 gramos de harina
- 150 gramos de mantequilla en pomada
- 100 gramos de azúcar
- 1 huevo
- 100 gramos de avellanas picadas
- 100 gramos de chocolate negro
Mezcla la harina con la mantequilla en pomada hasta conseguir una mezcla uniforme. Añade el azúcar y sigue mezclando. Incorpora el huevo y sigue batiendo. Agrega las avellanas picadas y el chocolate negro cortado en trocitos. Mezcla todo bien. Con la masa resultante, forma bolas del tamaño de una nuez y aplástalas un poquito con la palma de la mano. Colócalas en una bandeja para horno previamente forrada con papel de hornear. Hornea a 180 grados durante 12-15 minutos. Cuando estén doraditas, ya estarán listas para disfrutar.
Conclusión
En definitiva, las recetas con chocolate y avellanas son una auténtica delicia. Además, son fáciles de preparar y perfectas para cualquier momento del día. Con estas recetas que te hemos presentado, podrás sorprender a tus amigos y familiares con un dulce exquisito y único. Así que no esperes más, ¡manos a la obra y a cocinar!