Cómo hacer mantequilla de avellana casera en pocos pasos
Introducción
La mantequilla de avellana es una deliciosa opción para todas aquellas personas que disfrutan de los sabores dulces y cremosos. Además, es una opción saludable en comparación con otras mantequillas, ya que las avellanas son ricas en grasas saludables para nuestro cuerpo. Si siempre has querido hacer tu propia mantequilla de avellana casera, ¡sigue leyendo! En este artículo te enseñaré cómo hacer mantequilla de avellana casera en pocos pasos.
¿Qué necesitas para hacer mantequilla de avellana casera?
- Avellanas tostadas (500 gramos)
- Aceite de coco (2 cucharadas)
- Sirope de arce (2 cucharadas)
- Sal (1 pizca)
- Procesador de alimentos o batidora de alta potencia
Paso 1: Tostar las avellanas
Antes de comenzar a hacer la mantequilla de avellana, es importante tostar las avellanas para lograr el sabor y la textura deseados. Precalienta el horno a 180 grados Celsius y esparce las avellanas en una bandeja para hornear. Colócalas en el horno por 10-12 minutos, asegurándote de que se tuesten uniformemente.
Paso 2: Pelar las avellanas
Después de tostar las avellanas, necesitarás pelarlas. Este proceso puede resultar tedioso, pero es la clave para obtener la mejor textura y sabor en tu mantequilla de avellana. Para pelar las avellanas, colócalas en un paño de cocina limpio y frótalas entre ellas hasta que las pieles se desprendan y puedas retirarlas fácilmente.
Paso 3: Procesarlo en la batidora
Después de pelar las avellanas, colócalas en el procesador de alimentos o en tu batidora de alta potencia. Agrega el aceite de coco, el sirope de arce y una pizca de sal. Procesa la mezcla durante 8-10 minutos o hasta que la mezcla esté suave y cremosa. Durante el proceso, es posible que necesites detenerte y raspar los bordes del procesador de alimentos o batidora para asegurarte de que todo esté mezclado uniformemente.
Paso 4: Almacenar la mantequilla de avellana
Una vez que hayas procesado la mezcla lo suficiente y obtengas la consistencia deseada, transfiere la mantequilla de avellana a un frasco de vidrio con una tapa hermética. Guárdalo en el refrigerador para que dure por lo menos 2 semanas.
¡Conclusión!
Hacer mantequilla de avellana casera es muy fácil y solo requiere de unos pocos pasos. Con los ingredientes correctos y un poco de paciencia, puedes hacer tu propia mantequilla de avellana saludable y deliciosa en casa. Ya sea para untar en tostadas, agregar a batidos o incluso para comérsela directamente con una cuchara, la mantequilla de avellana será tu nueva opción favorita.
¡Espero que hayas disfrutado este artículo sobre cómo hacer mantequilla de avellana casera en pocos pasos! ¡Aprovecha esta deliciosa y saludable alternativa y disfrútala en tus comidas y meriendas!